Obsidiana

Lynda Rojas

El Camino del Despertar

Existen muchas miradas al respecto. La mía, prefiero narrarla desde el camino de la Obsidiana, que me ha servido como metáfora desde que llegué al mundo de los cristales para explicar ese proceso que nos conduce a lo que muchos llaman despertar de la consciencia.

La Obsidiana ha sido llamada por algunos autores «El Guerrero de la Verdad», porque su energía nos lleva al encuentro con nuestras verdades más profundas, aquellas que no residen en la mente ni en los discursos diarios, sino en el silencio y la paz interior.

Dicho de otra manera, la obsidiana nos confronta con el ego y nos ayuda a desarrollar la capacidad de observarlo. Se presenta en diversas formas, cada una con una vibración que nos guía hacia la verdad, pero con matices distintos que facilitan nuestro viaje interior.

Antes de iniciar este camino, vivimos en un estado de comodidad, en el que seguimos el libreto de la vida que nos entregaron. Buscamos la felicidad en cosas y logros que nos dijeron que debíamos alcanzar.

Este estado, llamado «NO SÉ, QUE NO SÉ», es donde buscamos el confort evitando lo que nos incomoda. Un amigo solía llamarlo el estado del «BOBITO FELIZ», y desde una perspectiva más académica, podríamos referirnos a él como la INCOMPETENCIA INCONSCIENTE.

Es entonces cuando aparece la Obsidiana Copo de Nieve, marcando el inicio del viaje.

Esta piedra se caracteriza por sus manchas blancas y grisáceas en un fondo negro de magma solidificado. Su energía es intensa y nos impulsa al despertar, comenzando a revelar lo que no sabíamos de nosotros mismos.

Este suele ser el ciclo más fuerte del despertar, cuando el alma da la señal para que todas nuestras experiencias se orquesten de manera perfecta y el viaje inicie.

Llegamos a la segunda etapa, el encuentro con la Obsidiana Negra, que representa toda nuestra oscuridad, todo aquello que ignoramos de nosotros mismos.

En este proceso, nuestra parte más temerosa puede tomar el control, eclipsando nuestra luz. Es una etapa difícil, pero también necesaria, porque es en la oscuridad donde la luz de la consciencia comienza a emerger.

A partir de aquí, transitamos hacia la Obsidiana Dorada, símbolo de autoconocimiento. Dejamos atrás la etapa del «NO SÉ, QUE NO SÉ» y entramos en el estado de «SÉ, QUE NO SÉ», donde tomamos consciencia de que ignoramos muchas cosas, y ese reconocimiento ya es un paso hacia la luz.

Mi buen amigo llamaba este estado «BOBITO PREOCUPADO», que también podríamos llamar la INCOMPETENCIA CONSCIENTE.

Aquí comenzamos a buscar respuestas. Devoramos libros de crecimiento personal, asistimos a talleres, consultamos sanadores y maestros espirituales, exploramos cualquier camino que nos prometa sentido y claridad.

Es una montaña rusa emocional: a veces sentimos que estamos cerca de la iluminación, y otras veces nos sumergimos en nuestro propio inframundo.

Poco a poco comprendemos que a mayor resistencia, mayor persistencia. Mientras más evitamos el desagrado, más nos persigue. «RESISTENCIA CAUSA PERSISTENCIA», y el aprendizaje muchas veces viene acompañado de lágrimas.

Hasta que, un día, aceptamos, soltamos y honramos nuestra existencia. En un acto de rendición, bajamos la cabeza, doblamos las rodillas y elevamos la mirada al cielo y confiamos en que hay un propósito mayor guiando nuestro camino.

Aquí comienza la última etapa del Camino de la Obsidiana, con la Obsidiana Arcoíris.

Esta fase simboliza la capitalización de nuestros aprendizajes. Es el momento en que la luz se refracta a través de nuestras lágrimas, permitiéndonos ver el arcoíris.

Podríamos decir que esta es la etapa de «YA SÉ, LO QUE SÉ», donde las competencias se hacen conscientes.

Y el ciclo… vuelve a comenzar.


YACIMIENTOS
México, Estados Unidos, Islandia, Tailandia, Japón

PROPIEDADES QUÍMICAS

Categoría: Mineraloide

Clase: Roca ígnea—volcánica (vidrio volcánico)

Fórmula Química: 70–75 % SiO2, plus MgO, Fe3O4

PROPIEDADES FÍSICAS

Dureza: 5 - 6

Fractura:  Concóidea

Tenacidad: Frágil

Peso Específico: 2,6

PROPIEDADES ÓPTICAS

Color: negro o gris opaco, pero puede ser amarillo, rojo, marrón verdoso

Brillo: Metálico

Transparencia:
Opaco

La obsidiana es un vidrio volcánico natural, formado por el rápido enfriamiento de la lava rica en sílice. A diferencia de los cristales que crecen en estructuras ordenadas, la obsidiana es amorfa, lo que le confiere una superficie lisa y brillante, perfecta para reflejar la luz… y también el alma.

Desde tiempos inmemoriales, la obsidiana ha sido utilizada como un espejo de introspección. Su intenso negro no es solo la ausencia de luz, sino un portal hacia los misterios del subconsciente, una herramienta de transformación para quienes buscan la verdad sin máscaras.

Historia

La obsidiana ha acompañado a la humanidad desde la prehistoria. Se han encontrado herramientas, cuchillas y puntas de flecha de obsidiana en diferentes civilizaciones alrededor del mundo, desde América hasta Europa y Asia.

En México, los aztecas la llamaban «itzli» y la utilizaban para fabricar armas, espejos adivinatorios y esculturas sagradas. Creían que la obsidiana tenía el poder de conectar con los dioses y revelar visiones.

También se usaba en rituales chamánicos, pues se decía que podía absorber la negatividad y desterrar la oscuridad espiritual​.

En objetos tallados también han sido usados en rituales de fertilidad que le han dado origen a la práctica del huevo yoni.

Tema para el que destinaremos otro post.

Por lo pronto te invitamos a echarle un vistazo a las Obsidianas de nuestra tienda online

acerca de mi

Después de dos décadas de experiencia profesional persiguiendo y acumulando los logros de una vida ordinaria, de una forma extraordinaria el reino mineral vino a mi encuentro en el año 2015 y lo que comenzó como un hobbie, poco a poco se fue transformando en un estilo de vida a través del cuál he podido compartir con otros mi pasión por viajar, investigar, aprender, emprender y crear.

Fundadora de Cristal Celeste (2015) y Parenthesis Consultores (2013).

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